Consejos para costaleros

Actualidad

Ya entramos en los días grandes de nuestra semana de pasión, semana esplendida en lo que al clima y al tránsito de nuestras hermandades se refiere.  Semana de grandes esfuerzos por parte del costalero. Es aquí, donde desde clínica vitae nos vamos a detener para analizar esos pequeños consejos que permitan a nuestros costaleros disfrutar aún más si cabe de su trabajo.

Muchos han sido los estudios, ponencias y artículos acerca del trabajo y del esfuerzo del costalero bajo las trabajaderas. Muchos de estos estudios científicos aportan una novedosa visión del esfuerzo físico, comparándolo a disciplinas deportivas. Bien es verdad que la preparación física es fundamental a la hora de realizar un buen trabajo bajo las trabajaderas de nuestros titulares pero hay algo más.  En el costalero hay una parte emocional, psicológica, de Fe, que no se puede cuantificar con medios científicos, hay un momento donde las fuerzas flaquean y sin embargo el costalero de raza, sufre y se levanta buscando ese caminar que su imagen necesita. No pretendo desde aquí reproducir sensaciones que tan sólo conocen aquellos que han tenido la dicha de ser costaleros, aquellos que creyeron morir en un esfuerzo y sin saber cómo, ni porque, resucitaron bajo las trabajaderas. Mi misión hoy, es describir aquellos aspectos importantes a la hora de la estación de penitencia que pueden ayudar a disfrutar de ella más aún si cabe.

D.Rafael Muñoz capataz de Ntra. Señora de la Paz, bien sabe y así lo dice una y mil veces que  el costalero muere por las piernas, pues son ellas la parte más débil.  Sostén y soporte del peso, más aún, en los pasos de palio, donde el rachear y paso corto hace que gemelos se carguen en exceso y aparezcan los temidos tirones.  Una buena hidratación y algunos estiramientos pueden alarga la vida útil de estas piernas, así como un calzado adecuado, siendo estas  las bases para poder realizar estos esfuerzos con el menor compromiso posible  para la salud.  El consumo de glucógeno provocado por las contracciones cortas en excéntrico que van realizando los costaleros de palio en su caminar,  hacen que se produzca una mala oxigenación de la zona por lo que es conveniente caminar a un ritmo normal y estirar siempre que nos sea posible durante los relevos o descansos.

La zona lumbar es otro punto clave, la protección mediante una faja adecuada, palia en gran medida las lesiones y protege la zona lumbar dando estabilidad a nuestra columna.  Nuestra recomendación es utilizar fajas que tengan cierto grado de flexibilidad, no fajas rígidas, ya que estas, al no permitir cierto grado de flexibilidad desarrollan o ejercen una inmovilización total de la zona lumbar y trasladan los ejes de fuerza  a zonas más altas  en concreto a la zona dorsal, que es quizás para mí el punto más conflictivo y al que menos importancia le damos. La zona dorsal es un lugar sin protección que recibe un exceso tensiones o cargas procedentes de la presión de la trabajadera y la tensión o fuerza que asciende desde suelo, es el lugar donde convergen esos ejes de fuerza pudiendo provocar una  hipercifosis que  en personas con edades por encima de los 45 años pueden ser motivo de acuñamientos vertebrales.

  La 7ª cervical, “vertebra sagrada” como la llama D. Antonio Santiago, debe ir protegida por un buen costal. Las modas han motivado multitud de tejidos, colores y formas de usarlo. No entraremos en la falta de armonía en los costales, en si es apropiado o no en una estación de penitencia llevarlo de un color u otro.  Diferenciando la estética de la buena práctica, bien es verdad que los costales actuales recogen de una manera más acorde el esfuerzo en esta zona siendo más armoniosos y haciendo que la “cuna” alrededor del la cerviz sea más armónica y permita cargar más y mejor los kilos con una mejor protección de las apófisis cervicales. Una buena colocación del mismo, no moverlo durante el recorrido, evitar volver a realizarlo tras los descansos y  nunca tapar los ojos, serán nuestra recomendaciones en este apartado.   El costalero debe ver, no debe omitir uno de nuestros sentidos primordiales del ser humano, la vista, ya que esta omisión hace que se modifique la alineación de la columna cervical y por tanto se desplace el trabajo por encima o por debajo de la vertebra sagrada.

 En lo que se refiere a las camisetas, no soy partidario del uso de tirantes, ya que además de poco higiénicas hacen que la humedad y traspiración sea excesiva y está humedad se traslade al ambiente pudiendo dificultar la respiración por las altas temperaturas y alto grado de humedad que se registran bajo los pasos.  La camiseta normal de algodón permite retener esta humedad evitando una rápida deshidratación, además de un enfriamiento excesivo que puede trasladarse en contracturas al choque térmico que se produce al salir en los relevos.

Por último y no menos importante decir que una buena preparación física previa ayuda y mucho.  Deportes de alta intensidad como el Crossfit que se basa en el trabajo de diferentes capacidades y habilidades: resistencia cardiovascular y respiratoria, resistencia muscular, fuerza, flexibilidad, potencia, velocidad, agilidad, psicomotricidad, equilibrio, y precisión y si además es realizado por personas como D.  Alfonso Morales Amate que aúna los conocimiento sobre el mundo del costal a la preparación física, pueden hacer que los resultados sean espectaculares.

Estas recomendaciones junto a una buena alimentación, una hidratación libre de bebidas alcohólicas, permitirán disfrutar aún más de nuestras hermandades y del bendito oficio de ser costalero por la gracia de Dios

Fisioterapeuta

Manuel Orozco Estrada

Te puede interesar…

Abrir chat
1
¿Te ayudamos?
¡Hola!
¿En qué te podemos ayudar?